Cáscaras, trapos, tronchos, cascarones, latas, alambres, vidrios, bacinetas, restos de autos y motocicletas, botes, botas, papeles y cartones.
Ratas que se meriendan los ratones, gatos de todas clases de etiquetas, mugre en los patios, en los muros grietas y la ropa colgada en los balcones. Fuentes que cantan, gritos que pregonan, arcos, columnas, puertas que blasonan nombres ilustres, seculares brillos. Y ante tanta grandeza y tanto andrajo una mano que pinta noche abajo por las paredes hoces y martillos. Texto de Rafael Alberti, «Si proibisce di buttare immondezze»